Al comienzo de este último curso aún no creo que signifique una etapa que comienza a finalizar, pero sí.
Septiembre inmejorable me enseñó que con una actitud positiva, llena de energía y fuerza, puedes conseguir cualquier objetivo que te propongas: así fue.
La confianza en tu interior y el saber hasta donde puedes llegar es de todas las cosas, lo mejor que puedes aprender de ti misma: lo hice.
Radiante, brillante e ilusionada comencé a afrontar octubre y a pensar que diciembre llega en apenas dos meses, teniendo en cuenta que antes de que empiecen a sonar los villancicos, tendremos una cita en noviembre con la responsabilidad de elegir gobierno. Entre todos estos pensamientos y emociones ETA deja las armas; capturan a Gadafi; me encuentro amigos que anclados en el pasado, me demuestran que la vida, es con ellos mejor; encuentro a mis ojos emocionados a ratos y en mis oídos la voz de siempre que me pide pausa, que me lo piense mejor.
Como honor a mi signo astral y con la seguridad que me caracteriza, siendo un ciclón me lanzo a la aventura del ejercicio con 17 kg. menos y echo de menos un equipo que hace años abandoné, hablo y pienso, no necesito pero deseo, contradicciones que resuelvo mil veces en mi cabeza y vuelvo a sentir, a vivir, a ser feliz...
Bienvenidos a estos últimos metros que me llevarán a la meta de la carrera de mi vida.
